Archivos Mensuales: julio 2014

Este verano, ¡todos a volar cometas!

Cometa volando

Tenía muchas, muchas ganas de escribir la entrada de hoy. Porque es una manualidad, porque es de reciclaje, y ¡porque vamos a hacer un juguete genial para este verano! Vamos a pasar un rato haciendo cometas, ¿os animáis? Pues ale, vamos a empezar.

La idea de este post ha salido de un taller que hicimos a principios de verano, y que la verdad, me encantó. Si no os habéis puesto nunca a hacer cometas, no penséis que es algo super complicado. Para nada. Hay unos cuantos modelos muy sencillos, que se hacen en un abrir y cerrar de ojos. La cometa de hoy me gusta mucho, porque es muy fácil de recoger, y no hay que liarse con las varillas, cruzándolas aquí o allá. De verdad que se tarda más en contar el paso a paso, que en hacerla. Ya veréis. Este verano, entre volar cometas y hacer castillos de arena super glamurosos, ¡lo vamos a pasar en grande!

Antes de seguir, deciros que lo único que nos interesa, como siempre, es pasar un rato divertido primero haciéndola y luego jugando con la comenta, y que esto no pretende ser una entrada super técnica, ni un estudio de física, ni nada de nada. Hago el inciso, porque esto de las cometas da para escribir libros y libros, y porque hay gente por ahí que son verdaderos profesionales del tema. Pero para nosotros, pensáis igual que yo, ¿verdad? ¡Genial! Pues vamos con los materiales. Vamos a necesitar una bolsa de basura, una varilla de madera (os las venden en cualquier tienda de bricolaje), celo, cuerda, bolsas de plástico de colores, una pajita (sí, eso blanco de la foto es una pajita de las de beber) y cartón (opcional).

Hay cuerda especial para cometas, pero a nosotros nos va a valer cualquier cordón de algodón o nylon que tengamos a mano. Tiene que ser un poco resistente, tenedlo en cuenta.

MaterialesLo primero que hicimos fue dibujar y cortar la vela. Desenrollad la bolsa de basura, y en la parte de abajo, hacéis un dibujo más o menos como el de la foto para que al desdoblarlo quede como un diamante. Para que no os quejéis, escribo encima de la foto las medidas que tiene que tener todo. Son más o menos aproximadas, para que tengáis una idea del tamaño del que estamos hablando. Lo importante es que tenga más o menos esta forma, y que sea simétrica (que lo va a ser, porque tenéis la bolsa doblada, así que de esto último no hace falta que os preocupéis demasiado).

Como consejillo, os diré que no uséis tijeras para cortar. Es mucho más sencillo si usáis un cutter. Lo msmo cuando más adelante cortéis las tiras de la cola.

Plantilla para la cometa

Después de esta foto pseudotécnica pero necesaria, viene la parte más divertida. Desdoblar la vela de la cometa, y decorarla, Aquí todo vale… pintura, pegatinas, o dibujos con rotuladores. Esta vez hemos decidido usar un sello que teníamos hecho con goma eva y una tapa de rosca, y llenar de flores de colores nuestra cometa. Con pintura acrílica funciona fenomenal. ¿Quien ha dicho que los sellos hay que usarlos sólo con tinta negra o azul? ¡Vamos a colorearlos y a llenar de colores nuestra cometa!

Decoración de la velaY aquí una muestra de cómo usar materiales varios para que los peques se entretengan un buen rato y luego vean volar sus dibujos.

Cometa - Dibujos de peque

Una vez hemos acabado de adornar la vela la cometa, podemos seguir con los demás pasos, que son los que van a conseguir que este trozo de plástico vuele. Sí, vuestra cometa va a volar ¡y muy bien!

Lo primero es cortar dos varillas del mismo largo que nuestra cometa, y pegarlas como veis en la foto. Se pegan con varios trozos de celo, en el centro y en los extremos de cada varilla. Yo puse en cada punto un trocito a lo largo, y por encima dos o tres atravesados, para que quede bien sujeto. No se va a despegar, no os preocupéis.

Recordad que la parte estrecha será la parte de abajo de la cometa, y ahí es donde más tarde pegaremos la cola.Vela estampada

Si os parece, la vamos a pegar ya, también con celo. Para hacer la cola de la cometa recortamos tiras largas de unos dos centímetros de ancho, de las bolsas de plástico de colores que hemos reservado (recordad lo que os contaba antes del cutter). Cuanto más largas las tiras, más chulo el efecto cuando vuele la cometa. Así que si las bolsas son grandes y cortáis las tiras a lo largo y las desdobláis, mejor que mejor.

Se pegan en las dos esquinas de abajo de la cometa, ¡no os despistéis y las vayáis a pegar arriba!

Detalle de la cola de la cometa

Ahora empezamos a preparar el soporte para atar la brida de la cometa. Para eso vais a necesitar cortar dos trozos de pajita de unos dos centímetros.

Pieza para atar la cuerda

Venga, confesad… teníais curiosidad por ver el uso que le dábamos a las pajitas, ¿verdad? En esta foto os enseño como tenéis que pegarlas (también con un celo)

Soporte para la bridaUna vez tenemos las dos pajitas pegadas, cada una en una punta del diamante y paralelas a las varillas, cortamos una cuerda tan larga como la parte más ancha de la cometa, y atamos en cada pajita un extremo. Podríamos haber hecho agujeros en la vela, pero se pueden rasgar. La tontería de la pajita hace la estructura mucho más fuerte. Os va a quedar tirante, es decir… la vela ya no va a quedar estirada. Está bien, no os preocupéis. Tiene que ser así.

A continuación, quiero que dobléis la brida justo por la mitad, y que hagáis un nudo sobre ella misma, como veis en la foto.

Nudo de la bridaEl siguiente paso es opcional. Vamos a preparar un soporte para la cuerda de nuestra cometa. Yo he usado como plantilla en un cartón, el de una de juguete que teníamos por casa, pero podéis variar la forma, e incluso usar el ovilllo de cuerda que tengáis tal cual. Este paso lo dejo totalmente al gusto del consumidor.

Y ya llegamos al último paso. Con la cuerda bien enrolladita, unimos un extremo a la brida que acabamos de atar a la cometa. Aquí no escatiméis en nudos, que no queremos perder la cometa mientras jugamos, ¿verdad? Creo que en esta foto se ve bien donde hay que hacer el nudo, pero si tenéis cualquier duda me preguntáis, ¿vale?

Curda atada a la brida

Como precaución, os recomiendo que el otro extremo del hilo esté bien atado al soporte, para que no se desenrolle todo por accidente. La cuerda no tiene por que que ser muy larga, entre cinco y diez metros puede ser suficiente. Yo diría que depende de donde vayáis a volarla. En ciudad o en el campo, más cortita. Y si vais a probarla en una playa que tenga poca gente, vais a querer bastante más cuerda. 

Espero que no os haya parecido complicado, porque de verdad que no lo es. Y los peques alucinan viendo sus diseños volar. ¿Que me decís? ¿Os animaréis a hacer una? A mí me ha gustado muchísimo hacerla, y creo que voy a profundizar un poco más en el tema y a seguir investigando y probando con otros modelos.

Recordad, que los comentarios me hacen tanta ilusión como si llegasen los Reyes Magos, pero que si me enviáis fotos de las cosas que hacéis, entonces, es cuando me vuelvo loca. 

Platos de sirenas

 

Conchas pintadas con purpurina

Seguramente el título del post por sí sólo no os de una pista muy buena de lo que va hoy la cosa. Os diré que es un post que le debía a Alba, a Bombón2, y que lleva en el tintero nada más y nada menos que desde el verano pasado. Sí, es una manualidad que viene con historia, pero os la cuento un poco más abajo, ¿vale?. 

Ahora que hace bueno y pasamos mucho tiempo al aire libre, es un momento genial para ir recopilando ‘materiales’ para nuestras manualidades. Piedras del rio, palitos, piñas, líquenes o conchas. Lo que se os ocurra, esteis en el campo o en el mar. Hoy aprovechando que tenemos a mano el poder pasear por el mar y recoger conchas, vamos a pasar el rato coloreándolas. De muchos colores.

Vamos con lo smateriales. Nosotros hemos usado conchas (claro), pintura acrílica de distintos colores, rotuladores permanentes, pegamento y purpurina. Lo de la purpurina es opcional, pero nosotros la teníamos a mano, y nos apetecía probar. 

MaterialesVuelve a salir a relucir la pintura acrílica. Ya sabéis que me gusta un montón, os lo he dicho otras veces. Enseguida cubre, seca muy rápìdo, y los colores son super brillantes. Pintamos con el color que nos apetezca, y podemos aprovechar para hacer mezclas de colores. No sé si a vosotros os pasa, pero en casa lo de mezclar colores es como hacer magia. No os imagináis el juego que nos da.

Empezamos a pintar.

Pintura acrílica

Unas cuantas conchas de las que tenía en casa, las más grandes, se vinieron de Conil el verano pasado. Hago un inciso para deciros que si no lo conocéis estaría bien que leyeseis la entrada que le dediqué, porque os va a encantar. Como os decía, tenía claro lo que quería hacer con las conchas que me traje de allí. Cuando estuvimos allí hace un año, Bombón2 tenía sólo un añito, y decidió que estas conchas serían su plato durante las vacaciones. Se pasó todo el tiempo que estuvimos allí, comiendo en conchas. Si le dábamos pan, hacía miguitas y las ponía en sus platos. Si era una galleta, más de lo mismo… Así que le he dedicado esta concha.

Dedicatoria

Este es el plato de sirenas al que me refería en el título del post.

Decorar conchas con rotulador

Y cuando me vio, Bombón1 también se puso a decorar otro ‘plato’ para regalarle a su hermana. ¿No os parece una versión mejorada del mío? Es genial dejarles a su aire, y que hagan lo que quieran en las manualidades. Esta versión es una chica, porque para que sea chica hay que pintar dos o tres pestañas como mínimo ¿Lo sabíais? El rollo hippie que le da el corazón me gusta mucho.

Decoración infantil

Por supuesto, este plato también estaba dedicado.

Dedicatoria de Bombon1

Seguimos pintando las demás conchas del color que se nos ocurriese. Y algunas de ellas las cubrimos con purpurina. Para pegar la purpurina usamos cola blanca un poco diluída con agua. Cuando echéis la purpurina por encima, tened cuidado de poner debajo un papel o una caja de cartón para poder recoger todo lo que os sobre.

Conchas cubiertas de purpurina

Esta es la colección que preparamos hoy. Nos lo hemos pasado genial coloreándolas. Pero además, tengo planes para estas conchas tan chulas. ¿Os las imagináis en un castillo de verdad dándoles el sol? Pues eso. Vamos a pintar alguna más, y a decorar nuestro próximo castillo de arena con ellas.Nuestras conchas para el castilloDecidme, ¿os animaréis a colorear parte de vuestra colección de conchas de este verano? 

Si os gustó el post, compartidlo en todas vuestras redes sociales ¡Vamos a llenar de color los castillos de arena de estas vacaciones!

 

 

 

Los lacitos son para el verano

Horquillas de lacitos de pasta

Los lacitos son para el verano, ya lo decían hace tiempo. Así que nos hemos aplicado el cuento, y hemos hecho una manualidad muy sencilla y rápida que hace tiempo vi en Pinterest, para poder ir estupendas en estos meses de calor. El año pasado hicimos unas chapas monísimas que podéis ver aquí, y este verano les toca a las horquillas. Además, hace dos semanas publiqué cómo customizar un capazo para la playa. ¡Por complementos veraniegos que no sea!

Los materiales para las horquillas de hoy, los tenéis a mano seguro. Necesitáis esmalte de uñas, pasta farfalle o de lacitos y horquillas. Para fijar la pasta a las horquillas, hace falta silicona caliente, aunque si no tenéis, la podéis reemplazar por algún pegamento un poco fuerte que tengáis a mano.

Lacitos - Materiales

Los peques se van a manchar un poco con el esmalte de uñas, es verdad. De la piel sale bien, no os preocupéis, así que tened cuidado con la ropa que lleven puesta, y listo. Luego las lucirán la mar de orgullosas por haberlas hecho ellas.

Lacitos - Pintando

Para nuestras primeras parejas hemos elegido un par de rosas distintos, que cosas de la vida, combinarán sin problemas con la mayoría de los trapitos de las peques. Si lo preferís, también se pueden pintar con pintura acrílica o con témpera. Pero lo del esmalte da un brillo muy chulo, y además no hace falta andar trasegando la pintura de aquí para allá. Cómodo y rápido.

Lazos pintados con esmalte

Cuando ya han secado, podemos hacer los dibujos que nos apetezcan. ¿Qué tal unos cuantos lunares? Nosotras los hicimos ayudadas por la cabeza de un arfiler. Aquí es cuando si los peques son muy peques, tienen que pedir ayuda a un mayor.

Lazos de pasta pintados

El último paso sí que es para un adulto. Pegamos la horquilla al lazo con una gota de pegamento o de silicona caliente. Como tarda en secar, al principio hay que sujetar la horquilla un rato para que no se mueva. 

¿Os cuento un secreto? Venga, va… que presiento que estaréis preocupados por qué pegamento usar. En las horquillas de esta foto, yo usé el pegamento para tela del que ya os hablé en el post del capazo para la playa Será para tela, pero de momento va pasando las pruebas que le ponemos estupendamente. Así que, ¿por qué no? Además pensándolo bien, no creo que se comercialice pegamento para pasta. Si alguien lo conoce, ¡que haga el favor de pronunciarse!

Fijación de la horquilla

Hay que esperar a que esté bien seco todo el esmalte para poder usar las horquillas. Aunque con menos tiempo es suficiente, yo os recomiendo que pasen al menos doce horas para que las podáis manejar sin miedo.

Así de chulas quedan en mi modelo favorita.

Horquillas de pasta¿Qué os han parecido? Las podemos hacer en todos los colores, para ir siempre bien conjuntadas nos pongamos lo que nos pongamos. Es rapidísimo, de verdad. Se tarda más en coger las horquillas y el esmalte de los armarios y ponerse a trabajar, que en hacerlas.

Si os gustó el post, no os olvidéis de compartirlo en vuestras redes sociales ni, por supuesto, de contármelo en los comentarios. Y si os animáis a probar, ya sabéis que me encantaría ver los resultados. 

 

Diez ideas para hacer con los niños este verano

Planes para el verano

Después de escribir sobre como organizar vuestros planes de verano en una estrella me apetecía escribir este post para comentar con todos la idea que últimamente tengo de los veranos.

Está claro que el verano es para descansar del curso, para disfrutarlo, y sobre todo para jugar mucho, mucho. Yo me acuerdo de cuando era niña de las salidas a comer al campo con mis padres y con mis hermanos, de escaparme en la hora de la siesta para ir a jugar al parque con la panda, o de cenar super deprisa, en diez minutos, para volver a salir con mis primos por el pueblo… ¡por la noche! Mucho, muchísimo aire libre.

No sé que recuerdos tendrán mis hijas de sus veranos, pero sí sé que todo lo que hagamos en estos años será lo que poquito a poco se vaya quedando en su memoria. Y que luego ya no me necesitarán tanto, pero que en estos primeros años lo que hagan junto a mí, será parte de su historia. 

En verano no me voy a complicar mucho la vida, pero no por dejadez, no penséis mal. Ya os conté hace tiempo en el blog cómo he aprendido de mis hijas que el verano es mucho más verano si lo que se espera de él son baños en la playa, y comer algún helado. Así que dedicarles tiempo, baños y comer helados juntas, son mis planes y lo que quiero tener asegurado. Lo demás, es accesorio.

Claro que en las estrellitas hemos puesto más cosas. ¡Nos queremos divertir! Pero ya os digo que cuidado con las listas… no vaya a ser que al final nos agobien por no poder llegar a todo. Os dejo aquí una lista de ideas, de cosas que podemos hacer. Son ideas opcionales, no que tengamos que ir tachando una a una.

  1. Jugar juntos todos los días.
  2. Baños en el mar y en la piscina.
  3. Comer helados.
  4. Ir al cine de verano.
  5. Aprender a hacer snorkel.
  6. Hacer una manualidad.
  7. Hacer fichas del cole. 
  8. Construir castillos de arena.
  9. Ir de excursión al campo.
  10. Andar de noche por la playa.
  11. Coger piedras en el río.
  12. Acampar en el salón.
  13. Ver la lluvia de estrellas.
  14. Pasar la noche en casa de los titos.
  15. Disfrazarnos.

¡Anda! Son más de diez, ¿verdad? Es que podéis hacer una lista tan larga como queráis. Cien cosas o más, En casa sólo las tres primeras con obligatorias. A mí además, me gusta tener alguna actividad especial para ese verano. El cine de verano fue la estrella del 2013. Este año, vamos a probar con el snorkel. Nos vamos en dos días a La Manga, un sitio muy bueno para practicar, incluso con niños pequeños… así que ya os contaré. Eso sí, tened en cuenta que estas ‘novedades’ se quedan para siempre, y habrá que buscarse la manera de hacer hueco para que puedan pasar de año en año si nos han gustado.

Habrá muchas cosas, también super divertidas, que surjan sin estar planificadas. Puede ser ir a un parque de atracciones, celebrar un cumpleaños en un parque, visitar un mercado medieval, volar cometas, ver fuegos artificiales o ¡aprender a tirar con arco!. Cualquier cosa puede surgir por sorpresa.

Al final el verano pasa muy deprisa y seguro que con poco esfuerzo, lo dejaréis lleno de buenos recuerdos para todos. ¿Qué os parece añadir a la lista de actividades ir haciendo un álbum para que más adelante podamos recordar lo genial que lo pasamos? Podría estar bien, ¿verdad?

Vosotros, ¿qué esperáis del verano? ¡Contadme que planes andáis organizando, que tener ideas para poder improvisar viene fenomenal!

 

El capazo de las celebrities, también para niña

Capazo customizado para niña

Ya ha llegado el veranito, y apetece salir a la calle a tope de color, y con mogollón de sitio para guardar nuestras cosas, ¿verdad que sí?. Pues exactamente lo mismo le pasa a la peque, que desde que tiene su capazo customizado, no lo apea para llevar sus juguetes de aquí para allá. Hacía tiempo que me llamaban la atención estos capazos. Los veía en todas partes: en las revistas, en internet, por la calle… Hace unos años tuve uno, y me acuerdo perfectamente de un capazo que tenía mi madre cuando era pequeña, bordado en rafia. Es una moda que va y viene, está claro. Esta vez, quería probar a hacer nuestra propia versión mini para el blog. Bueno, pues me ha gustado tanto el resultado, que me voy a hacer con uno grande para poder ir a juego las dos. Os lo cuento.

Estad bien atentos, porque he invertido mucho, muchísimo más tiempo en escribir este post que en customizar nuestro capazo. Así que si queréis, podéis hacer la parejita a juego casi con el mismo esfuerzo. Los materiales, super sencillos: pintura acrílica, una cartulina y un cutter o tijeras para hacer vuestra plantilla, y unos cuantos pompones y pegamento para tela.

Capazo - Materiales

Si pensábais que esto de pintar un capazo era meterse en un berenjenal de mucho cuidado, estáis muy, pero que muy equivocados. Nosotros no manchamos nada de nada. Os aseguro que hay muchas otras cosas de apariencia más simple con la que sí la hemos liado pero a base de bien. Esto fue visto y no visto, ya os lo he dicho.

Pintamos el borde del capazo

Al principio me había agenciado un rodillo pequeño para pintar pensando yo que sé que. No hace falta. Con un pincel como el que veis en la foto, es más que suficiente. Lo primero que hicimos fue pintar el borde, que me gusta que vaya a juego con el dibujo.

Preparamos una plantilla para pintar lo que más nos apetecía. Todo con pintura acrílica, que ya sabéis que me gusta mucho. Se puede usar en casi cualquier superficie, los colores son muy vivos, y resiste bien al agua. El único pero que le pongo a esta pintura, es que se acaba quitando con las rozaduras. En este caso del capazo, le dará un aspecto como ‘envejecido’, que a mí personalmente me gusta. Si os apetece proteger el dibujo un poco más y llevarlo siempre intacto, podéis aplicar una capa de laca para el pelo por encima.

Coloreando el capazo con plantilla

¿Os acordáis de que os he contado en alguna ocasión que las manualidades son un buen momento para hacer diseños antes de ponernos manos a la obra? Pues si os apetece, podéis practicar con los peques como queréis que quede el capazo.

Aquí elegimos hacer un gran corazón de color rosa. Hago un inciso para contaros que yo confiaba en la pintura acrílica rosa que ya tenía en casa, pero resulta que estaba agotada y en el último momento, cuando ya teníamos todo listo para empezar a pintar, tuve que salir a buscar más. Dicen que la etapa del rosa en las niñas es una etapa que se pasa. Bueno, pues para vuestra información os diré que aquí vamos camino de los cinco años y ahí seguimos, agotando todo lo que permita colorear de rosa o morado.

Así quedó nuestro corazón. No tiene que ser perfecto. No os preocupéis si el borde de vuestro dibujo no es super nítido. Esas pequeñas imperfecciones que veis se pueden quitar si os apetece cuando la pintura esté seca.

Decoración del capazo

Hicimos un corazón rosa porque ganó la peque, pero mi apuesta era hacer un barquito y pintarlo en azul. Pero bueno, todo se andará, y el corazón también es monísimo, ¿no os parece?. Otras ideas que salieron además del corazón y el barco, fueron una estrella, un ancla, una palmera, un sol, y como iba a ser para transportar juguetes, hasta un patito de goma. Os las dejo aquí escritas por si os apetece usar alguna 😉

Pompones para nuestro capazoEl capazo así, puede darse por terminado. Ya sabéis aquello de menos es más, tal y cual… Pero por esta vez, hemos decidido que a la playa antes muertas que sencillas, y nos hemos liado la manta a la cabeza con unos cuantos pompones que compramos en el bazar del barrio.

Hice la prueba cosiendo los pompones al capazo, pero no os lo aconsejo, porque al final las tiras de mimbre se rajan un poco al pasar la aguja por ellas, y no me parece buena idea. Tenía por casa pegamento para tela, y probé a ver que tal. De momento han resistido fenomenal, ya ha aguantado un par de tirones de Bombón2, y ahí siguen… así que creo que os lo puedo recomendar. Mucho más rápido que coser, ¿verdad?

Capazo customizado en casa

Aquí tenéis el capazo preparado para salir a la playa o a la piscina. Y como veis en la foto, ¡listo para transportar todos los planes del verano! Leedlo si no lo visteis la semana pasada, porque es una manualidad que me encanta para hacer todos juntos al principio del verano.

Capazo para la playa

Este capazo ya ha ido un par de veces de visita a casa de los abuelos, y ayer nos lo llevamos de paseo con un par de juguetes para pasar un rato en el parque.

Capazo listo para ir al parqueSiempre os digo que me gusta que las manualidades del blog sean facilísimas. Y me parece que esta vez lo es. Complicación cero, y un resultado chulísimo.

Contadme que os ha parecido el post, y que dibujaríais en vuestro capazo. ¡Ah!, y si os ha gustado, compartidlo en vuestras redes sociales, ¡que sepan todos lo super fácil que es hacerse con un capacito de lo más actual!