Da igual si es carnaval, una fiesta de verano, nochevieja, o el cumpleaños de tu tía. Un collar hawaiano siempre da un toque festivo, ya sea para disfrazarte del todo, o para usarlo como complemento. Y estoy segura de que este hecho con papel pinocho, te va a encantar. Por lo colorido, y por sencillo. Hace tiempo vestimos en el blog a nuestros muñecos de hawaianos, y hoy nos toca a nosotros. Os aseguro que el collar de aquel mini vestido me dio mucho. mucho más trabajo que el que te voy a enseñar hoy.
Así que hazte con hilo y aguja, ¡y manos a la obra! Lo primero es cortar las piezas de papel pinocho que necesitas para hacer el collar. Puedes hacerlo de colores diferentes como yo, o entero del mismo color. No es necesario ni que lo desenrolles para cortarlo. El ancho de los trozos que yo corté, para que te hagas una idea, es más o menos de seis centímetros. El ancho del corte será el ancho de tu collar, así que dejo la medida al gusto del consumidor.
Ya sé que cuesta imaginarse el collar sólo a partir de estos trocitos, pero espera y verás. Es momento de coger aguja e hilo, y empezar a unir las piezas. Antes las tienes que doblar en zig zag cada tira de papel. Empieza haciendo un nudo en uno de los extremos, y a atravesar el papel con la aguja. Se tarda más en contarlo que en hacerlo. Los peques más mayorcitos te pueden ayudar. Y si aún son pequeños para manejar una aguja, puedes darle algún recorte de papel pinocho para que coloren. Sí, sí, has leído bien. ¡Ya verás que caras!
Yo he usado un hilo de algodón un poco más ancho de lo normal, pero no creo que importe demasiado. Tampoco hace falta que tengas en cuenta el color, porque prácticamente no se va a ver.
Corta el hilo tan largo como quieras tu collar, llénalo de tus trozos de papel, y haz otro nudo en el final cuando acabes. Te tiene que quedar todo denso, pero no prensado, no hace falta que te vuelvas loco.
Vamos a uno de los extremos, que ahora empieza lo bueno. De momento el collar está suelto, ya lo unirás en los extremos cuando hayas terminado.
Hay que empezar a dar vueltas (siempre en el mismo sentido) a cada uno de los trozos, intentando que giren sobre el hilo. No te lleves el hilo con los giros, que si no se deshará todo en cuanto lo sueltes. No te preocupes, es mucho más sencillo de lo que parece.
En esta foto te enseño como va quedando con tanto giro. Verás que cada vez se van notando menos las vueltas, ¡y al final vas a conseguir que hasta se parezcan a un puñado de flores! Garantizado.
Esto lo tienes que hacer con el collar entero. De momento los dos extremos del collar están sueltos, y cada trozo de papel también. Así es mucho más fácil ir haciendo las vueltas que os he enseñado.
Yo he cortado alguna tira de papel más corta, porque quise intercalar un par de verdes de vez en cuando, y para que no queden muy sueltas y sigan dando continuidad al collar, necesité unir con pegamento todos los trocitos. Con que pegues cada punta es suficiente. Y bueno, yo he hecho un collar con muchos colores. Si haces tu collar de un color sólo, también quedará fenomenal, y seguramente ni necesites pegar las tiras de papel unas a otras.
Cuando estés contento con el resultado, puedes ayudar a dar un poco de forma en los bordes con la mano, intentando que los pétalos tengan más volumen y deshaciendo los dobleces que aún estén marcados. Recuerda que el papel pinocho se puede de alguna manera, modelar. Os lo enseñé cuando hice estos nenúfares.
Puedes ponerte uno, o varios. Como prefieras. El lei, que es como se llama este tipo de collare en Hawaii, se usa en allí como muestra de cariño en los saludos o en las despedidas. Así que bueno, aunque sea virtual, aquí puedes recoger el tuyo.
En casa ha gustado, y seguro que completamos atuendo para carnaval. De momento, se puede completar con una corona, y un par de pulseras, todo se hace igual. Y si sacas una camiseta y un pantalón corto del armario de verano, puede servirte como remedio de última hora. Si prefieres acompañarlo con una falda, aquí tienes una versión de falda de hierba también super fácil.
Si te animas a probar con el lei, me gustaría que me lo contases todo aquí abajo.