Archivos Mensuales: septiembre 2013

Una caja para mis trastitos

Caja reciclada

A veces los papis piensan manualidades para los peques… a veces los peques piensan manualidades para los papis. Eso es así. Hoy os voy a enseñar una cajita super mona que hemos customizado a partir de una caja de cerezas. Seguimos con actividades de reciclaje, como aquí.

Y es que hoy os traigo al blog otra manualidad que pensó Bombón1. ¿Os acordais de los dibujos con patatas? Entonces la peque pensó en algo que vio en unos dibujos animados. Pero estoy super contenta, porque esta vez, ha sido cosecha propia. La cajita de la foto estaba en la bolsa de los papeles para reciclar. Y cuando el papi se disponía a bajar todo el papel al contenedor, caja incluida, oímos un grito. – ¡Nooo, papi, no!, la caja no, ¡que la quiere mami! Claro, ante semejante grito tuve que salir a investigar que es lo que estaba a punto de perder. Al final del pasillo, el papá con cara de sorpresa, hombros encogidos, y caja levantada por encima de su cabeza. – Tú, ¿quieres esto para algo? – ¿Yo?, Yo no, ¿y tú, peque? – Yo sí mami, para hacer una malanidad (aún se le atasca un poco la palabra)

La caja en cuestión

Claro, podeís imaginar que la caja se quedó celosamente guardada hasta que hiciésemos un hueco para trabajar con ella. Siguió la conversación. – ¿Para que quieres la caja? – Para guardar cosas. – Y, ¿qué vas a guardar? – Pues, ¡mis trastitos!. La idea inicial era pintarla sólo. Luego decidimos ir añadiendo algún detalle más.

Pintando con rodillo

Además, usamos el rodillo para pintarla. ¡Fue muy divertido! Llegó la hora de poner atención a los detallitos. Y para ello recurrimos a los sellos de las peques que tenemos por casa. Seguro que vosotros también teneis. Animaros a buscar, ya vereis que chulos quedan si los empleais en alguna manualidad.

Sello Caperucita

En cada lateral un cuento…

Sello de Cenicienta

Bueno, y si habíais pensado mal con la primera foto del post enseñando como yo me había adueñado de la manualidad esta vez, os dejo esta otra con alguno de los peluches que se pelearon para estar en esa caja tan chula.

Peluches

Me ha gustado mucho compartir este post con vosotros, porque de verdad que me sorprendió la iniciativa de Bombón1 de hacer algo con una cajita que íbamos a tirar a la basura. ¿Os animais a versionarlo y compartir las fotos de vuestras obras? ¿Qué otras manualidades se os ocurren para reciclar y que además sean rapiditas?.

Anuncio publicitario

Operación cepillo de dientes

Kit para niños

Mami, ¿vienes a ayudarme con la pasta de dientes? Pregunta de todas las noches. Bombón1 ya es mayor, y le encanta cepillarse los dientes antes de irse a dormir. Pero creo que aún le gusta más que la acompañemos y ayudemos mientras lo hace. Entre la limpieza de los dientes y la canción de irse a la cama, nos pasamos un buen rato juntas a la hora de acostarse. En casa hemos llevado la operación cepillo de dientes poquito a poco, y sobre todo ayudados de cepillos y accesorios monísimos que venden para hacerlo más fácil a los niños.

Lo hemos hecho de momento, en tres fases… que coincide más o menos con lo que he leído en otros sitios. Os las comento, por si a alguien le puede servir, ¿vale?

Lactante. Particularmente, no creo que sea necesario hacer una limpieza habitual de la boca del bebé mientras ni hay ni usa los dientes. Sí que a veces cuando a las peques se les quedaba la lengua manchada de blanco por la grasita de la leche, se la he limpiado con una gasa. Y entonces se puede aprovechar para limpiar un poquito la encía.

Bebé. Cuando ya casi todos los dientecitos están ahí (en mi caso las dos han tardado, y me parece genial porque esas sonrisas de dos dientes me vuelven loca), entonces empezamos a usar un cepillo de dientes que sea blandito, con un poco de agua. En nuestro caso cepillarse los dientes tenía mucho de juego y nosotros ayudábamos a la peque sólo cuando pensábamos que lo necesitaba más. Nos vino muy bien dar con un cepillo de dientes con sabor a fresa, que debía ser fenomenal porque no había quien se lo quitase de la boca. Primer objetivo cumplido, habíamos creado una rutina, y el cepillo era nuestro amigo. Cada vez nos salían mejor los movimientos, aunque esa es la parte más complicada si queremos hacerlo bien.

El cepillo, como los de los mayores, tiene que estar siempre nuevecito, así que recordad ir cambiándolo (esto les va a encantar a los peques). Y nos cepillamos por lo menos una vez al día, siempre, siempre, antes de acostarnos.

Es en este momento cuando las páginas especializadas nos dicen que estaría bien una visita al dentista, para asegurarnos de que todo va bien. Hace tiempo leí como consejo, que tardásemos en despertar al goloso que el niño lleva dentro. No sé si habrá sido por esto o no, pero el caso es que aunque a Bombón1 le gustan, no se vuelve loca con los dulces. Eso que lleva ganado, ¿no creeis?.

Niño. Justo a la vuelta del verano hemos empezado a usar la pasta de dientes para niños. Como está super rica y es algo ‘de mayores’, va todo fenomenal. Eso sí ¡no hay que tragarla! Ahora nos ayudamos de un aparatito que se ilumina durante todo el rato que nos estamos cepillando, y sí que ponemos mucha atención a todos los movimientos del cepillo y a que la boca entera quede bien, bien limpita,

Yo de momento he tenido suerte, porque es algo que hacemos de buen humor, pero sé que no es el caso para todos los peques, y por eso pensé hacer este post. Para contaros que tal en casa y compartir un par de links que os pueden ayudar. Un montón de ayudas para que vuestra operación cepillo de dientes particular, salga redonda. ¡Os va a encantar!

  • El primero es una actividad para enredar un poco, de los que nos chiflan en el blog. En la misma página hay más manualidades para acostumbrarse al uso del cepillo de dientes.
  • La consulta del ratoncito Pérez, con consejos y videos que podréis enseñar a los peques para que se familiaricen con el proceso.
  • Si buscais información super detallada, o ideas para hacer en clase con los peques, por ejemplo… podéis echar un ojo aquí al programa sonrisitas.

Así que ya veis, no hace falta mucho para acostumbrar a los peques a lavarse los dientes… aprender jugando como siempre, y ver la visita al dentista como algo normal. Recordad que ellos no lo ven aún de ninguna manera, ni para bien, ni para mal. Hoy os animo a que dejéis en los comentarios trucos para que los dientes de vuestros renacuajos brillen como soles. Así ayudamos a otros papis, ¿os parece?

Cajitas de regalo super fáciles

Listas para regalar

Hoy es día de manualidad super fácil. Y además con una pequeña historia detrás, como a mí me gusta. Sé que más de uno de vosotros tiene almacenados en casa tubos de papel higiénico esperando que les llegue una buena oportunidad para hacer algo con ellos… Pues bien, desempolvad esas cajas, y sacadlos, que hoy os va a gustar lo que os traigo.

Antes de seguir con los detalles, dejadme hacer un inciso para agradeceros todos los comentarios y visitas de mi último post sobre qué ver y qué hacer en Conil. Habeis sido super generosos a la hora de hacer comentarios y correr la voz sobre el blog. Se ha leído tanto y se ha comentado tanto esa entrada, que me habeis hecho pensar que me quedé a medias con todo lo que os conté. He ido mucho a Conil, tengo referencias de muchos sitios más, así que no descarto el escribir una segunda parte. No pude contaros todos los sitios que me gustan en el post, y me da un poco de rabia eso… así que a ver si pienso alguna forma de arreglarlo. Está visto que Conil no cabe ni en quince días, ni en un sólo post de un blog.

Desde la semana pasada también ha aumentado el número de seguidores (otra vez gracias, de verdad), así que para los nuevos os comentaré que publico todos los martes a las 12:00. Tengo pensado aumentar el ritmo, así que si os suscribís al blog para no perderos nada, mejor que mejor.

Gracias

Bueno, vamos a ver como hacemos las cajitas, que es la manualidad de hoy. En realidad no hay mucho que contar, ya vereis que son super sencillas y que quedan fenomenal. Sólo hay que aplastar el tubo, hacer un par de dobleces en cada extremo, y quedan unas cajitas de lo más apañadas. Esta foto no es muy mona que digamos, pero se ve fenomenal lo que os estoy contando.

Cajas feas

¡Ah, casi se me olvida! Os he dicho que el post viene con historia… ¿Os acordáis de las chapas de plastilina que os enseñé hace unos días? ¿Y de que había una chulísima que me quería quedar yo porque me encantaba? Bueno, pues mi gozo en un pozo. Bombón1 tenía otros planes mejores: regalársela a tita Nuri. Así que en contra de mi voluntad, me tuve que desprender de ella. A tita Nuri le encantó, claro. Se la ponía a todas horas, así que la tenía siempre a mano, en su mesita de noche. Bien, tenemos esto por un lado. Y por otro tenemos a Bombón2 que tiene diecisiete meses, le encanta cotillearlo todo, todo, y mordisquear también todo, todo… os imagináis que pasó, ¿verdad? Pues sí, cinco dientecitos dan para dejar una marca de mordisco casi perfecta. Os lo aseguro. ¡Vaya disgusto! La chapa destrozada. Pero bueno, incluso con el mordisco seguía siendo chula, se podía usar así. Hasta que recibió un segundo ataque.

Así fue como nos pidió por favor que hiciésemos otra. Nos pusimos a ello, y las cajas son la idea que tuvimos para dársela cuando estuviese terminada. Lo primero que hicimos fue pintar los tubos del color favorito de Bombón1. Por cierto, me han dicho que la etapa del rosa se pasa, ¿alguien sabe a que edad?

Pintando en rosa

Nosotros terminamos uno haciéndole lunares, usando la goma de borrar de un lápiz. Y para el segundo decidimos decorarlo con alguno de los sellos que tenemos rodando por casa.

Cajas terminadas

¿A que han quedado chulas? Hemos usado pintura acrílica para pintarlos, pero se puede usar pintura de otro tipo, decorar con pegatinas, dibujar sobre ellos con rotuladores, añadir purpurina… ¡Las posibilidades son infinitas! Por cierto, las chapas triunfaron una vez más, todo un éxito. Os recuerdo que podéis ver como se hacen aquí.

Qué me decís, ¿eran fáciles o no eran fáciles las cajitas? Si os han gustado, ya sabeis… compartidlo, ¡que para eso tenemos todos los botones que hacen falta a continuación! Y sobre todo, sobre todo, no olvideis enviarnos fotos si os animais a probar en casa.

Vacaciones en Conil

Los Bateles

Me gusta tanto, tanto, Conil, que se ha convertido en nuestro hogar adoptivo en el verano. Hace unos cuantos años ya, lo elegimos como destino de vacaciones, y toda la provincia nos enamoró. Volvimos en el coche a Madrid, haciendo cálculos de como podríamos cuadrar las vacaciones para poder repetir el año siguiente. Y lo mismo hicimos el siguiente, y el otro, y el otro… Llevamos varios años fijando unos días para darnos una vuelta por Conil, y dedicando el resto de las vacaciones a otro lugar que va cambiando. Pero Conil no. Conil no cambia.

Conil tiene muchas caras, todas auténticas y muy interesantes. Como casi todos los que nos seguís en el blog teneis algún que otro bombón merodeando por casa, os voy a ir comentando que podemos hacer con niños allí. Aunque si no teneís peques, debeis seguir leyendo igualmente porque para cuando hayais terminado puede que esteis como locos, intentando reservar billete de avión o tren para hacer una escapadita. Podría hacer como en el post de La Manga, y organizaros un finde a tope de actividades. Pero si lo hago así, voy a tener el corazón super dividido y me voy a dejar cosas fuera seguro. Así que aún a riesgo de que el post sea algo largo, voy a aventurarme y contaros que sitios y planes son los que más nos gustan, y vosotros mismos decidís como hacer vuestra composición, ¿os parece?.

Baños y castillos
Las playas larguísimas, anchísimas, de arena fina… ideales para los peques. Fuente del Gallo, El Roqueo, La Fontanilla, El Chorrillo, Los Bateles, Castilnovo. Las calas de Roche preciosas, y resguardadas del viento los días de levante.
De todas, nos quedamos con las de La Fontanilla y Los Bateles. En general todas las playas son muy anchas, sin aglomeración de gente, y cuando baja la marea, al ser tan planas, se forman unos riachuelos donde los más pequeñines se pueden bañar sin ningún peligro, resguardados de las olas.
Son playas ideales para volar cometas, porque casi siempre tenemos brisa garantizada. Y las vistas que tendréis del pueblo desde los Bateles o desde Castilnovo, son impresionantes.
La Fontanilla
Hora de comer
Empezamos con el desayuno. Hay varias churrerías en Conil, que merecen que les deis una oportunidad. ¿A que más de uno tiene el recuerdo de cuando se traían churros a casa para desayunar? En Conil podréis seguir con la tradición llevándolos al apartamento o comiéndolos en el local, porque aquí están buenísimos.

Para tomar algo a media mañana o primera hora de la tarde, nuestros preferidos son: Que Bá, Dos Hermanos o el Bar Andaluz. Para nosotros son imprescindibles de nuestros viajes, pero si llevais cochecito de bebé hay que tener maña para acoplarlo en las terrazas. En fin, querer es poder. Y cuando se quiere un montadito Que Bá, se quiere. Ya me entenderéis cuando los probeis. Los días de levante, una de nuestras alternativas favoritas a la playa 🙂

En Conil se come fenomenal. Os puedo hablar de muchos sitios para cenar, pero os voy a recomendar nuestros ‘clásicos’. El Tascon de la Prensa (el salmorejo, su jamón o las tortillitas de camarones son riquísimos), Marisquería La Pepa (donde podreis comer marisco cocido, o fritura de pescado. Si no encontráis sitio en su terraza, podeis optar por comprar unos cuantos cucuruchos para llevar. Y ¿por qué no para llevar a la playa? ¡A los peques les encanta!), Terraza Medina (sin duda el mejor cazón en adobo que he comido en Conil). Y como mención especial, hablaros de La Fontanilla.

La Fontanilla

Desde que el tío de una amiga nos lo recomendó, está en nuestra agenda año tras año. Nos encantan sus pescados a la sal, pero es uno de esos sitios en los que la carta nos plantea un mar de dudas porque no se sabe que pedir. ¡Aun no hemos probado nada que no nos guste! El restaurante está a pie de playa, así que ver atardecer mientras cenas en él, es otro de los lujos que no os podeis perder. Cuando acaba la cena en La Fontanilla, nos encanta descalzarnos, salir a la arena, y volver al pueblo caminando por la playa de noche. Y creedme, esto sí que es un auténtico plan con niños, lo ven como una aventura. ¡Hasta con carrito de bebé!

Para después de las cenas o cuando el calor aprieta, nada mejor que tomar un buen heladito. A nosotros nos encantan Los Valencianos. Si vais por allí, ya veréis que majas son las chicas que atienden la terraza. ¡Allí podréis empezar vuestra propia colección de cucharillas de helado!

Si no quereis helado, o quereis alargar un poquito el plan, pasaros por La Tertulia. A primera hora está super tranquilo, y a los peques les encantará tomarse un refresco en sus patios.

Otros planes
Nos gusta el Parque de la Atalaya. Situado en una de las zonas más altas del pueblo, tiene unas vistas que son las que vienen a mi mente todo el invierno cuando estoy lejos de allí. Tiene mucho sitio para que los peques correteen, dos zonas de columpios y una zona con un circuito de fitness al aire libre ¡todo un lujo! El quiosco que veis en la foto es el Café la Atalaya, que abre todo el día. A nosotros nos encanta para desayunar mirando al mar, o para tomar algo tranquilamente a última hora, poco antes de retirarnos a dormir.

La Atalaya

Una opción de ocio que no debeis dejar pasar los que vayais con niños a Conil, es estar pendientes de las actividades del ayuntamiento. Conciertos, cine o fiestas infantiles son alguna de las opciones más atractivas que organizan. Este año tuvimos la suerte de coincidir con una de estas fiestas, con pintacaras, juegos con paracaídas, baile y castillo hinchable incluídos. ¡Las peques lo pasaron en grande! Totalmente recomendable.

El año pasado se creó el CIT, centro de Iniciativas Turísticas y Culturales, y nos vino como anillo al dedo, porque siempre estamos buscando planes nuevos que incorporar e nuestra ya apretada agenda en Conil. Esta vez probamos con una ruta por los patios de Conil, que nos encantó. Los niños estaban felices viendo ¡y oliendo! tantas plantas y flores. Pedro y su equipo, os amenizarán seguro la tarde. ¡Prohibido aburrirse!

Patio

Aún podeis conocer mejor Conil visitando su Museo de las Raíces Conileñas, o subiendo a la Torre de Guzmán. No es muy alta, se puede subir perfectamente con niños pequeños. Y desde arriba, vais a poder sacar unas fotos preciosas del pueblo. Os recomiendo subir al atardecer, que si el pueblo es bonito de por sí, aún se pone más cuando cae el sol. Juzgad vosotros mismos.
Santa Catalina
Al principio del paseo marítimo, todos los años hay un castillo hinchable para que los más pequeños den saltos como locos. Plan que podeis combinar con una visita a los puestos de artesanía del paseo.
Compritas
Ir de tiendas y llevarse algún recuerdo no puede faltar en nuestros paseos de la tarde. En la calle Cádiz y los alrededores veréis un montón. En cualquier esquina teneis garantizado una pulsera, un collar, un bolso o un pareo (yo tengo varios de Caminito de Cai, ¡me chiflan!). A los niños le encanta ver tantos colores y llevarse un recuerdito de vuelta a sus casas. Una pulsera, un vestido, una mochila o un cubo para la playa. Las pulseritas son ideales para sobrellevar la morriña del verano durante el invierno. ¡Nosotros tenemos nuestra mini colección!
No os podeis perder tampoco, los puestos del paseo marítimo que os he comentado hace un momento. Llenos de color y de mil detalles que os encantarán.

Calle Cadiz

Todos los viernes hay un mercadillo. Puede que os apetezca dar una vuelta por él. ¿Un clásico para nosotros? El puesto de aceitunas. Cuando las vemos ¡no podemos dejar de pedir!

Creo que no deberiais dejar pasar la ocasión de ir al mercado de abastos de la calle Rosa de los Vientos. Otro de los fuertes de Conil, su huerta y su pesca, cara a cara con vosotros. Algún que otro día he ido con cámara de fotos en mano… con sólo este dato, os podeis hacer una idea de lo que os vais a encontrar allí. Llevaros a los peques, les va a gustar… y ¡pueden aprender un montón!.

Pescado y marisco fresco

 Excursiones

Ya nos ha quedado un post super largo, así que desarrollar este capítulo me lo tengo que guardar para otra ocasión, porque dan para mucho. Resumiendo sólo algunas, podríamos recomendaros una excursión por la costa viendo playas como, entre otras, La Barrosa, Zahara, Bolonia o Valdevaqueros en Tarifa, una visita a las bodegas de la zona, las carreras de caballos en Sanlúcar, excursiones por el interior de la provincia: ruta de pueblos blancos, Grazalema, Jerez… ,una escapada a Sevilla o hacer una excursión de un día a Tánger. Todo auténticos planazos para los días que estéis por Cádiz.

El alquiler de apartamento es una buena opción si lo que vais buscando como nosotros, es integraros lo más posible en el pueblo durante vuestra estancia allí. De la mano de Más Apartamentos en Conil encontraréis una buena oferta para montar allí vuestro cuartel general. Seguro que os atienden fenomenal.

Ya veía yo venir que este post iba a ser super largo, porque es ponerse a hablar de Conil y ¡no acabar! Tenemos muchos planes aún en el tintero, y muchos bares y restaurantes que queremos conocer. Pero de lo que nos gusta no queremos sacrificar nada, así que a este paso lo mismo no tengo más remedio que extender mis vacaciones.

Este post no está patrocinado ni por las empresas ni por las personas que se mencionan en él, es solo una forma de agradecer a Conil los buenos ratos que nos ha hecho pasar. Espero que os haya gustado. Si teneis recomendaciones propias, animaros a completarlo en los comentarios. ¡Y si quereis compartirlo en las redes sociales, abajo teneis todos los botones necesarios para hacerlo!

A %d blogueros les gusta esto: