«Y a Alba le ha tocado, ¡¡¡venir disfrazada de castaña!!!» ¡de castaña! Creo que estuve releyendo varios días la nota que llegó de la guardería en la que nos decían como se habían repartido los disfraces de la fiesta del otoño. ¡Con lo fácil que habría sido pedir algo que tuviesen los chinos! En las notas de los niños había castañas, hojas, naranjas, limones… todo facilito, facilito, vaya.
Antes de ponerme a pensar en como hacer la castaña (por favor, leedlo sin doble sentido), miré en unos cuantos chinos que venden disfraces, a ver si sonaba la flauta y me lo daban ya hecho. Cuando uno no tiene ni idea de coser, y de eso dará fe este post, se agudiza el ingenio de una manera increíble. Eso sí, emepzando siempre por lo más sencillito Después de visitar tres o cuatro tiendas distintas, una que es perseverante, cambió el chip a cualquier disfraz que viniese con una tela grande marrón. Cualquier cosa me valía. Pues nada, lo más parecido que encontré fue un disfraz de Yeti que ante la idea de castaña peluda me mandó directita a casa a seguir dándole vueltas al asunto.
Y mira por donde, recordé que alguien me había dicho alguna vez que habían hecho un disfraz de castaña con la funda de una maleta. Y yo tenía fundas de maleta… ¡marrones! Como podéis comprobar, en el Mundo ya ha habido al menos dos personas con la suerte de tener que hacer este disfraz de castaña. Y como eso incrementa peligrosamente la probabilidad de que te pueda tocar a tí hacer lo mismo, he decidido contaros como hicimos el nuestro. Mis fundas de maleta estaban hechas polvo… pero sólo le iba a pedir a una de ellas aguantar un día. Luego podían autodestruirse si les parecía bien. Así que me fui al trastero, y me subí esto.
La funda mide aproximadamente, unos 75cm de ancho por 50cm de alto. Las medidas son aproximadas, no me toméis al pie de la letra que os conozco, y de lo que se trata es de coger la idea. Está hecho para una niña de dos años y una vez metida por la cabeza sin atar, le llega más o menos por debajo de las rodillas. La abertura para el asa de la maleta va a ser el cuello del disfraz, ya está hecho. Lo primero que hay que hacer es recortar las esquinas para que la funda asiente un poco mejor en los hombros. Aquí tenéis que coser un pespunte. Os dije que no era un post de corte y confección, pero no que no tuviésemos que echar mano de aguja e hilo.
Después de hacer esto, lo probamos y a la altura de los brazos cortamos media circunferencia para sacarlos. Ya no necesita mucha más cosa. El mismo cordón que lleva la funda nos va a servir para atar el traje a la cintura. Poquito a poco va tomando forma de castaña. Pensé añadir algo de relleno, pero como tiene bastante volumen abajo, creo que no es necesario. Os lo dejo a vuestro criterio. Además, si no le metemos nada dentro, más cómodo para los peques. De hecho, tenía tanto volumen, que como a la altura de la cintura y en los lados le di un par de puntadas para quitarle vuelo.
Aún faltan un par de detalles para darlo por terminado. Uno es ayudar a que se vea la castaña un poco mejor, pintando vetas en colores ocres y marrones. La parte de abajo de la castaña hay que hacerla bastante ancha, porque mucho quedará escondido al atar el disfraz en la cintura.
Para dibujar en el disfraz usé ceras blandas. Y después usé laca para el pelo para fijar un poco los colores. Así empecé el dibujo, y fui cubriendo cada vez más la tela hasta dejarlo como veis en la primera foto del post.
Además del vestido hice un tocado para imitar el piquito de la castaña. Eso sí, he visto muchas castañas :-), y ahí jugaba con ventaja para los detalles. Luego le puse una nota de color con unas hojas y unas flores de tela que encontré en los chinos, que de esto sí tenían… ¡a mares!. Recorté las que más me gustaban, y me quedé con estas.
Todas juntas quedaron así de monas. No son hojas de castaño, pero si queda un poco otoñal, que era el tema de la fiesta.
Usé uno de los picos que habíamos recortado para hacer la forma de los hombros del traje para hacer el ‘tocado’, y pensé que sería mucho más sencillo de llevar si lo cosía a una diadema que si lo sujetábamos con horquillas.
Pinté de blanco el pico de la castaña cuando ya estuvo todo montado, y ¡listo! Disfraz de castaña preparado para la fiesta del otoño.
Alba se fue encantada al cole con su disfraz casero. Espero que os haya gustado el post, y que si por casualidad habéis llegado aquí buscando como hacer un disfraz de castaña os haya dado al menos un par de ideas. Que eso también hice… buscar en google, pinterest… y nada de nada (o al menos nada que me convenciese).
Así por curiosidad, ¿me contáis cual es el disfraz más raro que habéis tenido que hacer y como lo hicistéis? Contadme, que todo son ideas y todas son bienvenidas.
Etiquetado:disfraz de casataña, disfraz de otoño
Me muero de la impresión de que lograses hacer la castaña con esa funda. Si yo no he sido ni capaz de hacer unas orejas de Minnie para mi bichilla (menos mal que al final las encontré en una tienda de fiestas infantiles).
¡Jajaja! ¡Qué exagerada! Las orejas es que llevan un lazo encima que es para nota ¿De verdad las intentaste hacer??? Me alegra que al final las encontraras.
Monísimo monísimo el disfraz de castañita!!! Y muy bien explicado!!
Eso espero, que se entienda y saque del apuro a más de uno 😉 ¡Es muy fácil!
Te ha quedado increíble. Perfecto!!! Eres una mami 10 y a los que deciden los disfraces en ese cole habría que decirles unas cuantas palabritas!!!
Bueno yo se de alguien (que lee de cuando en cuando el blog), que se tuvo que enfrentar el año pasado a hacer un disfraz de tiburón porque en el colegio de su peque hacían un belén del fondo del mar. ¡Eso ya es para nota!
Jo, qué chulo te ha quedado. Menos mal que has puesto foto de la funda, porque no tenía ni idea que se llamaba así :p Me ha encantado. Tomo nota para carnaval…
Estaba hecha polvo, aunque no se aprecia en la foto. Tuvo que pasar por un completo proceso de remiendos por aquí y por allá… ¡Pero era marrón, y era grande! De ahí tenía que salir la castaña sí o sí.
Hola, no conocía tu blog y me gusta mucho. Este disfraz es genial, has logrado exactamente que sea una castaña!! y lo veo díficil. Me lo voy a guardar, con tu permiso, para posibles eventos me parece muy original.
Gracias.
Al final se parece a la castaña, sí jajaja. Después del sustaco inicial, a mí me ha gustado que es muy fácil de hacer (requisito imprescindible para luego aparecer en el blog), los peques van cómodos, y si hace frío se les puede abrigar bien por debajo.
¡Si algún día te animas, déjanos ver tu creación!
Bienvenida al blog, espero que sigas por aquí mucho tiempo.
mi prima fue con 3 años vestida de cebolla, estaba linda!!! x)
¡Anda!, ¡de cebolla! Si es que en algunos coles son de lo más original buscando disfraces… Seguro que estaba monísima.
Que conste que no he puesto fotos de ella, pero Alba iba guapísima. Eso sí, dentro de unos años no quiero ni imaginarme lo que dirá cuando se vea en las fotos. Espero que quede claro que la idea de la castaña no fue cosa mía 🙂
Muchas gracias por Toda explication, a nosotros nos ha tocado este anyo!!!
Gracias Lid. Esta forma de hacer el disfraz es muy sencilla, así que ¡a por ello!. Verás que bien queda.
Hola todavia tienes este disfraz de castana ? Te lo pago es que no encontre en ninguna tienda .gracias
Hola! Lo conservé un tiempo, pero después de jugar con él también en casa, ya no sobrevivió.
Pero hay que animarse ¡Es muy fácil!