Tenemos el verano encima, y muchos os estareis planteando si viajar a Disney con niños pequeños, si esperar a que los peques crezcan un poquito o lanzaros ya a la piscina… Nosotros estuvimos el verano pasado con Bombón1.
Me he animado a escribir este post, porque seguramente os interese tener una opinión más al respecto. En las fechas que fuimos, Bombón1 acababa de cumplir tres añitos, y Bombón2 tenía sólo cinco meses. La decisión en cuanto a la pequeña estaba clara… se quedaría en casa de los abuelos, porque aunque pudiese haber ido a Disney perfectamente, no iba a entender nada, ni aprovechar los paseos de un sitio a otro. Así que sólo podía cansarse. Además, haciendo eso, Bombón2 se convierte en mi excusa número uno para volver a repetir el viaje. Personalmente, me parece genial saber que tengo que volver.
Pero, ¿que hacíamos con Bombón1 que tendría tres años? ¿No sería muy pequeña para entender todo? ¿Se le olvidaría todo lo que vio a la primera de cambio? Antes de contaros que nos fue bien una vez allí, atentos porque os voy a contestar vuestra pregunta ¿Nos vamos o no nos vamos?Sí, sí y sí.
Con tres años, Bombón1 vio realmente a Mickey y a Minnie, ni por su imaginación pasaba que una persona pudiese estar dentro del muñeco. Es una edad genial. Ya va a hacer un año que volvimos y cuando se pone a dibujar aún hace dibujos para regalárselos a Minnie cuando la vuelva a ver.
Si teneis tantas ganas de ir como tengo yo siempre, posiblemente hayais leido ya lo suficiente, y tendreis una sonrisa de oreja a oreja, y ya no cambiéis de opinión os cuente lo que os cuente a continuación. Pero leed un poco más si quereis que todos disfruteis por igual del viaje.
Vamos a irnos, ¿no? ¡Bien hecho! Lo primero que tenemos que tener claro es que queremos que el peque lo disfrute, así que habrá que hacer algo que se adapte a su ritmo. Y convertir la visita a Disney en SU viaje. Destacaría estos puntos:
- Alojarnos en un hotel Disney. Es comodísimo ir y volver al parque. Lo puedes hacer las veces que quieras, ya que la frecuencia de autobuses de los hoteles es altísima. Si estais en el hotel Disney, entonces no necesitais ni autobús. Si vais a París, las comunicaciones con el parque también son sencillas, pero lógicamente se tarda más y al final todo el paquete os va a salir bastante más caro.
- Así que casi mejor en este viaje nos olvidamos de París, ¿vale? París es precioso, pero tiene tantas cosas que ver, que si vais al parque, con un único día ‘robado’ al viaje de Disney no es suficiente para conocer la ciudad. Os gustará, os gustará mucho, pero tendréis un palizón en el cuerpo que no es para un niño pequeño.
- Madrugad y aprovechad que alojándose en los hoteles Disney, el parque abre una hora antes para nosotros. Es el momento de ir a las atracciones que más cola tienen.
- Alquilad una silla de bebé, porque los parques son grandes y la vais a amortizar. Yo prefiero alquilar allí que llevarme la mía. Si os llevais la vuestra, que sea una a la que no teneis demasiado apego… por si acaso. Eso sí, teneis que saber que aunque son amplias, no se reclinan.
- Para comer, yo llevaría las comidas desde aquí. Reservar en los restaurantes una vez alli es muy fácil. Hay muchos sitios donde elegir, son muy bonitos, y hay varias opciones, de distintos precios. No recurriría a comer perritos o pizza en cualquier sitio, porque son malos y caros. Pensad que el rato que os senteis a comer os va a servir también de descanso. Y muy importante, este punto puede marcar la diferencia entre decir que allí se come fatal, o que os gustaron mucho las comidas.
- Nosotros nos fuimos a dormir la siesta al hotel todos los días. Bombón1 aún la necesitaba, y de paso todos cargábamos las pilas para la tarde. He de decir que muchos días no conseguía dormirse por lo emocionada que estaba.
- Las colas de las atracciones son largas, y se pueden hacer pesadas patra niños tan pequeños. Hacedlas sólo si veis que el peque va a aguantarlas. Podeis probar el ‘Fast Pass’ en las atracciones que lo tienen (aun así algo de cola hay), o jugar con las horas en las que las atracciones tienen menos demanda. Llevad preparado algún juego para esos tiempos de espera.
- Buscad a los personajes Disney en el hotel y en los parques, ya que para los peques es como un atracción más. Haceros todas las fotos que podais, porque al final son preciosas. Si hay un fotógrafo de Disney, que os haga también. Nunca se sabe si al final del viaje alguna os puede gustar más que la de vuestra cámara. Se van acumulando en la tarjeta que os dan, y podeis comprar las que querais (o no) en cualquier momento.
- Explorad las otras ‘atracciones‘: las fotos con personajes o posando en los escenarios del parque, o las tiendas que hay por todas partes.
- Respetad el ritmo de los peques. Elegiremos las atracciones para ellos, así que si hay que subir a ‘It’s a small World’ que les encanta, tres veces, pues se sube tres veces. Ya sabeis lo que les gusta a los peques eso de repetir. Si no vemos tooooodo el parque, no importa. Vamos a intentar ir donde se lo pasarán bien. Y si no llegamos al espectáculo de la noche porque están ya muy cansados, pues nos vamos al hotel. El dia siguiente intentamos que duerman la siesta mas tarde, y nos quedamos un ratito más.
Sabeis que me hace una ilusión tremenda cuando comentais en el blog, así que no os cortéis, y contadme si estais pensando ir a Disney con los peques, o si ya habeis estado que consejitos podeis añadir para que el viaje les salga aún más redondo a los que van a ir por primera vez. Y si teneis alguna duda, estaré encantada de contestaros si os la puedo resolver.