Diciembre es un mes ideal para las manualidades, ¿no os parece? Bueno, a mí todos los meses me parecen buenos, pero es que en Navidad, con todo tan bonito alrededor y los peques en casa, es perfecto para que se agolpan las ideas. El otro día os conté cómo hacer unas felicitaciones de Navidad super chulas. Habréis probado, ¿no?. Bueno, pues corriendo, que si no, se os acumula el trabajo. Aprovechando que casi todos tenemos ya puesto el árbol en casa, os voy a enseñar a hacer con los peques unos adornos muy chulos.
Aquí estamos como locos con el árbol. Y eso que este año tiene su riesgo, no sé cómo va a sobrevivir a un bebé de 20 meses. Yo también me acuerdo de cuando sacábamos todos los adornos de Navidad, no me extraña que les encante. De un año para otro hay alguna cosa que se olvida, y es genial volver a verlo todo.
Para la manualidad de hoy vamos a necesitar, plastilina que seca al aire, cuentas o abalorios (podéis usar las de algún collar roto), y un punzón o un palillo para decorar un poco más los adornos. Y si queréis, podéis utilizar también corta pastas, cintas y esmalte de uñas para cuando estén terminados. Yo os doy la idea, luego la imaginación es libre.
Empezamos por una bola de plastilina que aplastamos para colocarle los abalorios que queramos. Y aquí cabe casi cualquier cosa.
Una vez hemos colocado todas las cuentas como más nos gusten, podemos picar los adornos con un punzón de esos que venden para plastilina. Esto a los peques también les encanta, y además queda muy chulo.
¡No os olvidéis de hacer un agujerito y pasarles un lazo que os guste! Este es el primer grupo de adornos que hicimos.
Y Bombón2 con 20 meses, también se puso a experimentar con los adornos. Mirad lo bien que se lo pasó. Ver cómo enseñaba orgullosa lo que había hecho, fue lo mejor de toda la actividad.
Como según los hacíamos fuimos regalando algunos, y le sacamos el gusto a eso de decorarlos, seguimos con la producción. Esta vez probamos con los corta pastas.
Me gustan cómo quedan en el árbol con los colores tan vivos. Podéis hacer que sean un regalo para los titos, abuelos… Cuando la plasti está seca, se puede escribir en ella con un rotulador o un boli. Podemos poner por detrás, por ejemplo, el nombre del niño y el año.
Es una idea más para hacer durante las vacaciones, e ir montando vuestra exposición particular en el árbol.
Antes de terminar el post, os recuerdo que tenemos un concurso activo en el blog, y que además es para correr la voz de una campaña navideña chulísima. ¡Animaros a participar, que hay muchas opciones de ganar!
Ahora decidme, ¿vosotros hacéis adornos de navidad caseros? ¿Os vais a animar a probar con estos? Ya sabéis, lo quiero saber todo, todo. Y si os gustó el post, podéis regalarme más abajo un +1, que siempre es más que bienvenido.