Hoy os invito a que hagáis pegatinas. Es una actividad prácticas y sobre todo, muy, muy entretenida para los peques. Ya que estamos terminando con la vuelta al cole y muchos tendréis totalmente interiorizado el proceso de marcar cosas, voy a aprovechar para proponeros esta manualidad antes de que os enfriéis con el tema.
Vais a necesitar materiales muy simples: papeles de colores llamativos, papel blanco, un par de tapones de distinto tamaño (si tenéis troqueladoras es el momento de sacarlas a relucir), papel para forrar libros adhesivo, rotuladores permanentes, y unas tijeras. Por cierto, compré un par de cuadernos rosas super sosos, para customizarlos y guardar en ellos todos los dibujos que vayamos haciendo en casa… que el otoño promete ser lluvioso.
Estos son los materiales para la primera idea, que os contaré más tarde. Y las peques estaban de hecho encantadas, ayudándome a cortar círculos por aquí y por allá, pero ya que teníamos la técnica y la fábrica en marcha, nos fuimos a rebuscar dibujitos que nos gustasen más. Todo un acierto. Así que os voy a pedir que entre los materiales preparéis también revistas infantiles de esas viejas, con todas las actividades ya hechas, y alguna que otra página arrancada. Antes de llevarlas a reciclar vamos a darles una segunda oportunidad. Aunque en la foto sólo hay dos, en casa las tenemos a mares, y seguro que vosotros también (venga, confesad).
El paso a paso os lo explico para hacer pegatinas de nuestros monigotes favoritos en lugar de las etiquetas, ya que se hace todo igual. Revisad bien las revistas o lo que os quede de ellas, y recortad los dibujos que más os gusten. A mí me gusta dejarles un pequeño margen alrededor como veis en la foto. Cuando ya tengáis el dibujo que queréis convertir en pegatina, lo único que hay que hacer es ‘plastificarlo’. Esto lo hacemos despegando una esquinita del papel de forro, y volviéndola a bajar poco a poco colocando el dibujo en el medio. Mirad la segunda foto, que se entiende mucho mejor.
Insisto en lo de volver a pegar poco a poco, especialmente si la pegatina va a ser un poco grande. Es para que no se hagan burbujas. A continuación recortamos nuestro dibujo plastificado volviendo a dejar un pequeño margen alrededor, y ¡ya está!… primera pegatina lista para usar en el momento, mañana, o dentro de un mes. Cuando queráis. Nosotros las fuimos pegando en el cuaderno nuevo, que para eso lo habíamos comprado y pedía pegatinas a gritos.
Estos son sólo algunos de los dibujos que se iban a convertir en pegatinas, y pasar de estar en páginas olvidadas que nadie volvería a ver, a estar en primera plana del cuaderno de actividades del curso. ¡Casi nada!
Así dejamos uno de los cuadernos. ¿A que mola? La verdad es que tendría que decir que esto es una fase intermedia de cómo quedó el cuaderno. Ya sabéis que los niños tienen una especie de relación compulsiva con las pegatinas y no pueden parar de usarlas cuando se ponen a ello. Y nosotros hicimos muchas, muchas, todas de colores muy chulos, así que seguimos pegando monigotes por aquí y por allá hasta que casi no cabían más.
Sara estuvo super entretenida decorando su cuaderno. Entre las revistas ‘olvidadas’ como les llamamos en casa, había también un catálogo de juguetes, y también convertimos en pegatinas a alguno de sus favoritos. Me gustó mucho hacer esta actividad, porque igual que os conté en el collage del fondo del mar o cuando hicimos el mosaico, a los peques les viene fenomenal el practicar con las tijeras. Dejadles a su aire, y ya veréis las caras de orgullo cuando hayan acabado con sus cuadernos.
Y ahora sí. Esta es la primera idea que tuvimos para las pegatinas, las etiquetas. Aunque nos pueden servir para marcar libros y cuadernos, la idea inicial es que nos sirvan para poner nombre a los regalos de cumpleaños. Empieza el curso, y vamos a hacer muchiiiiiiisimos. La única diferencia de estas pegatinas, es que en este caso llevan dos círculos de papel para conseguir el efecto de etiqueta.
En la primera foto del post veis que he hecho acopio de etiquetas para poner nombres a los regalos. ¡Tengo unas cuantas para vivir de las rentas una temporada!
¿Os animáis? Los materiales son de lo más simple, muy fáciles de encontrar, y es una manualidad de las que enganchan, lo que significa… un buen rato de entretenimiento asegurado. Un valor en alza ahora que por aquí se avecinan tardes largas de lluvia.
Decidme que os parecieron y compartidlo en vuestras redes si os ha gustado. ¡Muchas gracias!
Por cierto, si queréis más ideas, aquí tenéis otra opción para que los peques customicen sus propios cuadernos.
Etiquetado:como hacer pegatinas, decorar libretas, hacer etiquetas, manualidades para regalar, pegatinas caseras
Que chula que son estas pegatinas!!! Eres una artistaaaa!!!
¡Aquí no podemos parar! Cualquier cosa que se nos ponga a tiro acaba convertida en pegatina. Lo último ha sido un dibujo la mar de mono de mi mayor, que ha ido directo a un cuaderno que utilizo en el trabajo 🙂
Qué chulas!! Pues yo también tengo algún que otro cuaderno soso, soso, …
😉 me encantan las Valentinas!!!
Pues ale, ¡ya sabes como decorarlo!
Una idea estupenda y fácil de hacer. Me gusta!! Y para los regalos, son lo más!!
Es muy cómodo, yo siempre andaba buscando donde poner el nombre… ¡Este curso lo tengo resuelto! 🙂
mi tía me traía papel adhesivo blanco y yo hacía dibujos y los recortaba, para los intercambios de stickers a la hora del recreo ofrecerlos como exclusivos y únicos jajaja, qué trapicheos!!! xD
Trueques en el cole, ¡como mola eso!
Seguro que te quedaban genial… ¿conservas alguno?